El temporal que ha cruzado Cataluña en las últimas 24 horas, provocando las trágicas lluvias en Tarragona, también ha provocado destrozos en las comarcas orientales de Barcelona. A parte de las crecidas de las rieras del Maresme, con un fallecido en Arenys de Munt, la pasada noche se desató un tornado entre los municipios de Riells i Viabrea y Gualba, entre la comarca del Vallés Oriental y la Selva.
Los vecinos de la zona contemplaron horrorizados como varios golpes de viento de más de 100 km/h destrozaron cristales, coches, árboles, muros, torres de tensión, etc., en la urbanización Junior Park de Riells i Viabrea. Una vecina relataba la experiencia como un momento aterrador, «como si un tornado nos envistiera». El ayuntamiento del municipio pidió a la gente que no saliera de sus casas hasta que no los equipos de emergencia no hubiesen retirado los objetos lanzados por el tornado.
Las imágenes de la destrucción que causó muestran la potencia del fenómeno:



Antes, el tornado había impactado en un camping de Gualba
De camino a Riells, el vendaval había arrasado un camping en el Vallés Oriental. Destrozó varios bungalows, desplomó árboles y muros y llegó a herir a 3 personas. Una ambulancia trató las heridas de una niña de 7 años y una mujer de 35, que incluso las evacuó a un hospital cercano. Además, los paramédicos atendieron a una tercera persona, un hombre de 44 años que presentaba heridas leves fruto de cristales rotos, pero lo enviaron también al hospital.
Los numerosos daños que dejó la tormenta en esta zona han obligado a los Bomberos a peinar los terrenos del camping, por si encontraban bajo la runa otras víctimas. Afortunadamente, la búsqueda no encontró nuevos cuerpos