Trágica noticia en la crónica negra española por la muerte de un bebé de año y medio después de atragantarse comiendo frutos secos. Los hechos han tenido lugar en el municipio de Soses, en la comarca del Segrià (Lleida). Así lo ha informado el diario Segre de esta localidad catalana.
Una vecina estudiante de enfermería intentó reanimar al niño antes de que llegara el Servicio de Emergencias Médicas (SEM). Todas las alarmas saltaron al ver que el bebé no respiraba. A pesar de la rápida actuación del personal sanitario, desgraciadamente nada se pudo hacer para salvarle la vida.
Ahora la familia de la víctima, que es natural de Marruecos, ha pedido la repatriación del cuerpo del niño a su país de origen. Primero tendrán que esperar a que concluya el período de investigación como marca el protocolo en estos casos. La autoridad judicial está a la espera de recibir los resultados de la autopsia.
Una vecina intentó salvar al menor
Las autoridades han confirmado la muerte de un bebé de 18 meses atragantado con frutos secos. El suceso ha conmocionado al municipio de Soses, en Cataluña, de 1.700 habitantes. Los hechos ocurrieron el lunes por la tarde, cuando el menor aprovechó un descuido para meterse un fruto seco en la boca.
El niño estaba al cargo de su abuelo en el momento del incidente, y empezó a dar síntomas de ahogamiento. Los padres, alarmados, salieron a la calle para pedir ayuda y obtuvieron el apoyo de varios vecinos. Los primeros intentaron ayudar al pequeño, pero sin conocimientos de primeros auxilios.
Fue María, una estudiante de cuarto curso de enfermería en Lleida, la que practicó las primeras maniobras para salvar al niño. Introdujo los dedos en su boca pero no halló ningún cuerpo extraño. Entonces realizó las maniobras para este tipo de casos, consistentes en golpear la espalda del menor.
Momentos de mucha angustia
“Estaba en casa y oí gritos de dolor que venían desde la plaza, mi madre llamó al 112 y yo decidí bajar”. Es el relato en primera persona de María, la estudiante de enfermería que intentó salvar la vida del niño. “Había mucho descontrol”, recuerda, “les pedí a los padres si me dejaban ayudarles y me dieron al niño”.
Tras los primeros intentos fallidos de desatascar las vías respiratorias del niño, empezó con las maniobras de reanimación. Le ayudó otra vecina profesional del ámbito de la salud, mientras esperaban la llegada de las ambulancias. Los nervios se fueron apoderando de todos, ya que el niño no mejoraba.
La ambulancia de Alcarràs estaba en otro servicio, así que tuvieron que hacer llegar otras desde Lleida. Llegaron en quince minutos, pero no pudieron reanimar a la víctima que murió minutos después. Hasta el lugar se desplazó la alcaldesa, Sandra Marco, alertada por los gritos de auxilio de los padres.
Piden ayuda para la familia
El cuerpo del menor fallecido fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Lleida, donde se le practicará la autopsia. Los padres han expresado su voluntad de repatriar el cuerpo de su hijo a Marruecos. Pero no disponen de los recursos necesarios para hacer, y han pedido ayuda a los vecinos.
El ayuntamiento de Soses ha hecho un llamamiento para recaudar fondos destinados a repatriar el cuerpo del menor. En un comunicado oficial, han pedido la colaboración de los vecinos en esta causa. “Desgraciadamente, ayer el pueblo sufrió la pérdida de Akram”, se puede leer en el comunicado.
“Se ha pensado en ayudarlos económicamente para que puedan llevarlo a Marruecos. Si alguien está interesado en colaborar el miércoles, el jueves y el viernes de 10 a 14 horas habrá una hucha en el ayuntamiento. Por la tarde estará de 18 a 20 horas en el Centro Cívico, donde podréis hacer vuestros donativos”.