Una estrella supergigante roja conocida como Betelgeuse, que comparada con nuestro Sol tiene un diámetro 1.400 veces superior y con un volumen de 1.000 millones más grande, podría explotar y convertirse en una supernova. Esta estrella está ubicada en la constelación de Orión, a unos 600 años luz de la Tierra y es famosa por ser una de las más brillantes en el cielo nocturno.
Oleada de especulaciones entre la comunidad científica
Pero ahora, durante las últimas semanas, Betelgeuse se ha atenuado significativamente, y ha provocado una oleada de especulaciones entre la comunidad astronómica. Betelgeuse siempre ha sido foco de las miradas científicas, ya que es famosa por el hecho de que algún día explotará y será visible durante el día y posiblemente eclipsará a la Luna por la noche. Este cambio tan inesperado ha apresurado a la comunidad científica a compartir sus opiniones de que esto podría ser signo de una próxima explosión y eventual aparición de una supernova.
El director del Departamento de Física de la Escuela Uppingham (Reino Unido), David Boyce, escribió en su cuenta de Twitter que «la disminución repentina en el brillo de la estrella ha sido evidente incluso para el ojo de un observador general». Sugirió que si está a punto de convertirse en supernova, la explosión produciría «más energía en solo unas pocas horas que a lo largo de sus millones de años de existencia».
¿Explotará la mencionada estrella?
El hecho que la supergigante roja sea ahora más tenue que en el pasado podría ser un síntoma de que podría explotar. Pero no toda la comunidad científica coincide con estas afirmaciones. Betelgeuse es una estrella variable bien conocida, cuyos aumentos y descensos de brillo han sido rastreados durante años por astrónomos aficionados y profesionales que trabajan con la Asociación Americana de Observadores de Estrellas Variables (AAVSO).
Estas mediciones demuestran que el brillo de Betelgeuse tiene diferentes ciclos, ascendentes y descendentes. Cuando se juntan los mínimos de cada ciclo, la estrella podría verse excepcionalmente débil, como ahora, pero se iluminará poco después. Por ello, los especialistas subrayan que es poco probable que Betelgeuse explote en los próximos 100.000 años y tal vez no hasta dentro de un millón de años, reseña el portal. Además, sugieren que el cambio en el brillo de la estrella podría deberse a algún tipo de erupción de gas o polvo