Karlos Arguiñano es además de un chef de prestigio, uno de los personajes televisivos que más cariño le tiene la gente desde que comenzase a cocinar en TVE. Posteriormente, hizo lo mismo en Telecinco y ahora le vemos en Antena 3.
Arguiñano ganó mucha notoriedad por su espontaneidad a la hora de dirigirse a los espectadores mientras cocinaba sus suculentos platos.
Pero no todo fue tan bonito en la vida de Karlos Arguiñano, ya que uno de sus proyectos, KA, no fue tan bien en sus inicios. Fundado en el año 1979 y relanzado como hotel, bombonería y bar a principios de los 90, le dio un gran disgusto que pudo costarle caro.
Hay que recordar que este fue uno de los profesionales que fundaron la 'nueva cocina vasca' junto a Juan Maria Arzak y Pedro Subijana allá por los 70.
Karlos Arguiñano sufrió de lo lindo hace años
Eso sí, actualmente, el restaurante que regenta en Zarautz es un referente en la cocina vasca. Desde hace años, presenta un exitoso programa de cocina en la cadena principal de Atresmedia.
Arguiñano comenzó joven en esto de la hostelería. Con 17 años, se apuntó a la Escuela de Hostelería del Hotel Euromar en Zarautz, cuyo director era Luis Irizar.
Lo que no esperaba el chef es que años después, tras fundar KA, este proyecto le diese varios quebraderos de cabeza. E incluso a pesar de trabajar duramente en el mismo en la década de los 80, contrajo una deuda que casi le lleva a quedarse arruinado.
Arguiñano estuvo a punto de arruinarse por completo
Una situación muy peligrosa para él porque los bancos y los proveedores le pedían una cantidad elevada de dinero. Y es que Arguiñano llegó a deberles hasta 250 millones de pesetas. Lo que serían actualmente 1,5 millones de euros al cambio.
Por suerte para él, la llamada de TVE para que presentase un programa de cocina allá por 1991 hizo que todo cambiase en su vida.
Gracias a El menú de cada día, en La 1 de TVE, la suerte le sonrío y en 1992 recibiría el 'TP de Oro' como personaje del año. En 1993, se hizo con el 'Ondas' en la categoría de 'Programas nacionales'.
Unos años después, pensó que lo mejor era abandonar España y dirigir su carrera hacia otro país, en este caso Argentina.
Karlos cruzó el charco para estar allí unos años y, en España, dejó el programa que presentaba en manos de Ramon Roteta, Eva Arguiñano y Begoña Atutxa. Estamos hablando un espacio que cambiaba su nombre y se llamaba por aquel entonces Cocina con fundamento. Este se emitía de lunes a viernes en Telecinco.
La vida actual le sonríe al cocinero vasco
A partir de 2010, todo cambió para él y se cambió de grupo de comunicación aterrizando en Atresmedia. Lo cierto es que lleva más de 12 años cocinando para los espectadores de Antena 3 y sus datos de audiencia siguen siendo positivos a pesar de llevar tanto tiempo en la cadena.
Además, el vasco tiene el orgullo de haber escrito más de 60 libros de recetas y su hotel-restaurante Karlos Arguiñano va fenomenal.
Este presenta "una oferta culinaria que une la línea tradicional con la innovación de la prestigiosa cocina vasca". Así reza la página web de este restaurante por el que pasan miles de personas a lo largo del año.
Aquellas deudas que le hicieron temblar ya han quedado atrás y los ingresos de su actividad llegan a los cinco millones de euros anuales.
Eso sí, el beneficio de auto está en torno a los 50 000 euros a cuenta de los gastos de proveedores y del personal que le acompaña en su restaurante. Además, su patrimonio alcanza los tres millones de euros.
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