"Aquí, cuando se hace esto, es para acostarse conmigo". Fue uno de los centenares de mensajes que recibió Iván, un joven de 17 años, de su hostigador Vicente Paradís, de 57 años. El fatídico desenlace de este insistente acoso acabó con la vida del menor, que encontró en el suicidio la única manera de escapar.
El hombre de 57 años chantajeó al menor para tener relaciones sexuales
Ocho meses después de la muerte del joven, el jurado popular de Castellón ha condenado a Paradís, que ha sido considerado el homicida por ser “conocedor de la angustia que estaba causando". Aun así, el responsable del suicidio de Iván, no cesó de enviar mensajes amenazantes.
Todo tuvo lugar en 2016, cuando el chico decidió entrar en una página web de contactos. Allí empezó a comunicarse con Vicente, a quien nunca llegó a conocer personalmente. Tras proponerle tener relaciones sexuales con él, Iván se negó y quiso cortar la comunicación. El ahora ya condenado, no aceptó un no por respuesta y se inició una sucesión de mensajes hostigando al chico.
119 menajes con amenazas que el joven no pudo aguantar
El menor llegó a recibir 119 mensajes en menos de siete horas. En casi todos ellos amenazaba y chantajeaba con publicar las conversaciones previas, su número de teléfono, explicarlo a sus familiares e incluso denunciarlo. “Te enseñaré a no hacer perder el tiempo”, “te juro que te comerás un buen marrón”, “arruinaré a tus padres por tu culpa”, "derramarás lágrimas de sangre delante de los jueces y de tus padres", son algunos de los mensajes que llevaron a Iván al suicidio.
El joven de 17 años, ante los abrumantes mensajes que no cesaban, se limitó a pedir perdón y rogar que parara. Llego a advertir a su acosador hasta once veces que se suicidaría si cumplía sus amenazas. A lo que Vicente respondió con más mensajes. "¿Quieres saltar ahora?", "si te suicidas les dejarás el marrón a tus papás", "voy a por ti", "voy a arruinar a tus padres por tu culpa", envió.
Nadie supo el porqué del suicidio hasta ocho meses después
La presión que supuso para Iván lo llevó a la precipitada decisión de quitarse la vida. Se precipitó al patio interior del piso donde vivía junto con sus padres. La tragedia y el duelo de los familiares se unieron a la incertidumbre de saber el porqué de su suicidio. No fue hasta pasados ocho meses que la policía pudo acceder al contenido del teléfono del menor.
El acusado tenía antecedentes por abusos sexuales
El descubrimiento de los mensajes por parte de los agentes, llevó directo a la detención de Vicente Paradís. En su primera declaración confesó haber enviado los mensajes que mataron a Iván. El ministerio fiscal asegura que el acusado mantuvo una actitud de "permanente hostigamiento y chantaje emocional" a la víctima. Al parecer, Paradís ya contaba con antecedentes penales por abuso sexual 12 años antes.
Un chico normal víctima de un homicidio
Ante las falsedades de la defensa, los padres explicaron que Iván solo era un joven que exploraba su sexualidad, jugaba al futbol, iba al conservatorio, pertenecía a una peña y salía con sus amigos. Además, el Tribunal Supremo objetivó que “si la víctima no se hubiera encontrado en la situación creada por el autor, no se hubiera producido el resultado que finalmente tuvo lugar".
El condenado se puede enfrentar a 14 años de prisión
Tras el veredicto, el fiscal ha elevado de 12 a 14 años la petición de prisión para el condenado, a la espera final del magistrado. En contraposición, la defensa ha pedido las penas mínimas y la intención de recurrir la sentencia. Fiscalía y acusaciones han estado de acuerdo en solicitar el ingreso inmediato en prisión de Vicente, al considerar el riesgo de fuga por la gravedad de la condena.