El calorazo que se avecina este fin de semana será de primera división. La llegada de una masa de aire africano muy cálido disparará los termómetros con un ambiente asfixiante en casi todo el país. Se superarán los 35º en gran parte de España, pero se alcanzarán los 40º y 45º en varias zonas.
El calor azotará especialmente el interior de la mitad sur de España, donde se alcanzarán las máximas más altas. Parece que el peor día de todos será domingo, cuando más de medio país se derretirá. Atención también a las noches, serán de insomnio en el centro, sur y Mediterráneo.
El calor tan fuerte se trasladará el lunes hacia el este y Baleares, pero ya empezará un brusco descenso en el resto. De hecho, el martes la masa de aire africano se desplazará rápidamente. De este modo, el calorazo durará pocos días y, por esta razón, no se considera finalmente una ola de calor.
La excepción será el Cantábrico, que quedará muy al margen de esta situación. Pese a que las máximas también subirán ahí, el ambiente será de lujo en comparación al asfixiante calor del resto.
En Canarias, el calor irá también un poco a más con muchas máximas de 28º a 30º. Ambiente de pleno verano con pequeños cambios en el cielo. Habrá más nubarrones en islas montañosas sin descartar alguna llovizna puntual.
Viernes 9 de julio
De cara al viernes, 9 de julio, las temperaturas ya empezarán a ser duras de soportar en amplias zonas del centro y sur. Los termómetros subirán más y se esperan entre 31º y 36º en muchos puntos del interior. No obstante, en Extremadura, Castilla-la Mancha e interior de Andalucía se rozarán o superarán ya los 40º.
El ascenso más destacado de los termómetros se vivirá en el interior de la mitad norte. No obstante, seguirá el fresco o calor muy moderado en el Cantábrico. En cuanto al calorazo, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya ha activado las primeras alertas por TºC extremas:
Todo ello con mucho sol en general, pero polvo en suspensión y algunas calimas ya en el tercio sur. Tan solo algunas nubes bajas dispersas en tramos del Mediterráneo sin descartar alguna llovizna. Restos de nubes sin lluvia en el Cantábrico y viento en el Estrecho.
Sábado 10 de julio
Atención a las temperaturas el sábado, 10 de julio, debido a que se dispararán mucho más. El ascenso será especialmente importante en todo el interior peninsular. Muchas máximas se moverán entre los 33º y 38º, aunque aún quedarán ligeramente por debajo en el interior norte.
No obstante, en el valle del Guadalquivir y más zonas del interior sur ya se alcanzarán o superarán los 40º. También aumentarán las noches tropicales. En este sentido, las alertas de Aemet por calor extremo se extienden claramente:
En el Cantábrico seguirán entre los 20º y 25º, aunque subirán más en Galicia. Todo ello con sol en general, salvo algunas nubes en el extremo sur peninsular con calimas. Habrá más polvo en suspensión sin lluvias y viento intenso en el Estrecho y costa noreste.
Domingo 11 de julio
Todas las miradas están puestas al fuerte pico de calor del domingo, 11 de julio. Las temperaturas se dispararán más y el ambiente será asfixiante. También tendremos noches de insomnio extensas, con mínimas de más de 20º (noches tropicales) e incluso de 25º (noches tórridas).
Durante la jornada del domingo, más de media España será un horno. Estamos hablando de que la mayoría de máximas se moverán entre los 34º y 39º. Pero en Castilla-la Mancha, Madrid, Extremadura y Andalucía se superarán estas cifras.
En todo el interior de la mitad sur, las máximas se moverán entre los 40º y 45º con ambiente asfixiante. No se descarta alcanzar los 40º también en el Alto Ebro. Por ejemplo, podemos alcanzar los 41º en Logroño, Madrid y Badajoz, 42º en Sevilla y Ciudad Real o 45º en Córdoba.
El calor y el bochorno también serán muy intensos en el Mediterráneo, aunque aquí el pico cálido llegará el lunes. Pese a que también subirán las temperaturas en el Cantábrico, en esta zona quedarán al margen del calorazo. Sol con algunos intervalos de nubes, calimas y algún chubasco en el noreste.
Brusco descenso del calor
De cara al lunes, el aire tan cálido se desplazará al este y Baleares, donde se vivirá el pico de calor. La peor parte se la llevará el extremo sureste, con máximas que pueden superar los 45º, por ejemplo, en Murcia. No obstante, en el resto del país viviremos ya un brusco descenso de temperaturas.
Una bajada que puede llegar a ser de 10 o más grados y el descenso llegará al este también de cara al martes. Por lo tanto, el calorazo acabará de golpe y volveremos a valores más normales para la época en pocas horas. Por esta razón, no hablamos de ola de calor.