Rodrigo Córdoba, un conocido editor de 50 años, ha fallecido este lunes al caer desde un quinto piso mientras trabajaba. Estaba realizando unos trabajos verticales en un edificio de viviendas en el distrito madrileño de Hortaleza. Su repentina muerte ha causado una profunda consternación.
El lunes solo trascendió que un trabajador de 50 años había fallecido en un accidente mientras trabajaba. Ayer se reveló la identidad del fallecido, y la conmoción se apoderó de todo su entorno. Rodrigo Córdoba era editor de Zoográfico Ediciones, una editorial alternativa fundada en 2009.
Natural de Buenos Aires, Córdoba se había convertido en un referente de los ambientes vanguardistas de Madrid. Publicaba poetas fuera del circuito comercial y desarrollaba su labor de editor con una vocación casi artesanal. Impulsó varios recitales e hizo varias giras fuera de Madrid.
Murió en un accidente laboral
Rodrigo Córdoba, editor alternativo conocido en los círculos vanguardistas de Madrid, ha muerto a los 50 años. El accidente laboral ocurrió en torno a las 14:45 horas del lunes, en la calle del Pintor Antonio Saura del barrio de Sanchinarro. La policía está investigando las circunstancias del suceso.
La víctima se encontraba realizando trabajos a la altura de la quinta planta del inmueble. Por razones que se están investigando, se precipitó al vacío cayendo varios metros hasta el tercer piso. Murió prácticamente en el acto, sin que las asistencias sanitarias pudieran hacer nada por su vida.
La policía está realizando las comprobaciones oportunas para determinar las causas de este accidente laboral. Se trata del segundo siniestro laboral en pocas horas en España, lo cual enciende todas las alarmas. Un joven trabajador de 28 años murió al derrumbarse el techo de una nave industrial en Sevilla.
Muestras de dolor
Rodrigo Córdoba lideraba la editorial alternativa Zoográfico Ediciones, una de las más conocidas en el mundo de la contracultura poética y de los fanzines. Impulsó recitales como el ‘Valiente Inverso’ junto a Marcos Almendros. También hizo giras fuera de Madrid con escritores de su editorial.
El ámbito editorial y de la contracultura en Madrid se ha visto sacudido por la prematura muerte de Rodrigo Córdoba. Editores, poetas y libreros han mostrado su pesar por la pérdida de un referente en la capital española. Rodrigo llegó a España hace veinte años y era un editor muy conocido.
Sus allegados y conocidos han llenado las redes sociales de mensajes despidiéndose de él. Podrán darle el último adiós a partir de hoy, a las seis de la tarde, y hasta mañana a las ocho, en el Tanatorio Norte de Madrid. Rodrigo era una persona muy conocida y se espera que pasen decenas de personas.
Se ganaba la vida en los andamios
Rodrigo se ganaba la vida como podía, y desde hace algún tiempo se subía a los andamios para realizar trabajos de albañilería. Compaginaba su trabajo con la pasión editorial, y lanzó su sello para publicar a los poetas menos comerciales. Entre ellos había muchos autores poco conocidos de León y Valladolid.
El martes, cuando se dio a conocer la identidad del fallecido, empezaron a circular en las redes sociales varios mensajes. “¿Sabéis si le ha pasado algo a Rodrigo de Zoográfico?”, preguntaba un editor amigo del fallecido. Pronto se confirmaron los peores presagios, y la noticia corrió como la pólvora.
“Mi amigo Rodrigo era un currela, trepaba a los andamios, se ajustaba los arneses y se colgaba de una cuerda todas las semanas ocho horas al día”, dice un conocido suyo. También recuerda que “era un padre generoso, amante de su hija. Resbaló, dicen, mala suerte, dicen, no fue un accidente sino un asesinato más”.