Las temperaturas extremas de los últimos días en buena parte de la costa oeste de Estados Unidos han llevado a esta zona desértica del sureste de California a una marca emblemática de 54,4 ºC, en el Valle de la Muerte este pasado domingo, 16 de agosto. Este valor, todavía está pendiente de confirmación oficial. De ser así, se trataría de la temperatura más alta registrada en esta zona del planeta en los últimos 100 años.
Falta de validación de los datos
En las redes sociales se ha difundido rápidamente el dato y, en algunos casos, se han saltado alguna parte de la información, dando la impresión de que el Valle de la Muerte ha marcado este domingo el récord históricomundial de calor y no es así. El récord mundial se situa en 56,7 ºC registrados el 10 de julio de 1913 en Fumace Creek, California. Esta marca está reconocida por la Organización Meteorológica Mundial.
Aun así, expertos como Christopher Burt, insisten en que los equipos disponibles a principios del siglo XX no ofrecían garantías de calidad en temperaturas muy elevadas. Burt considera que la temperatura más alta registrada con técnicas fiables en la Tierra podría corresponder a los 54°C registrados el 30 de junio de 2013 en estar en el Valle dela Muerte.
Consecuencias graves
Las altas temperaturas han provocado un incremento en los incendios forestales y cortes en el suministro eléctrico en diversos puntos de California. El pasado viernes una planta de electricidad de gran importancia para el sur de California dejó de funcionar justo cuando el calor hizo que la demanda de electricidad aumentara a un pico.
Los operadores de la red ordenaron a los servicios públicos que redujeran sus servicios y alrededor de 2 millones de personas perdieron el servicio en el transcurso de cuatro horas. Antes del viernes, el operador de la red de California no había impuesto apagones continuos desde la crisis energética de 2001, cuando cientos de miles de clientes se turnaron para sumergirse en la oscuridad, los precios de la energía se dispararon a niveles récord y la empresa de servicios públicos más grande del estado quebró.