La Policía Nacional ha detenido a un exmilitar de 68 años por dejar que su mujer agonizara hasta la muerte durante cinco días. La víctima, una mujer de 67 años, fue hallada en el suelo en condiciones higiénicas y sanitarias deplorables. Llevaba años sufriendo un infierno de malos tratos y vejaciones.
El Ministerio de Igualdad ha confirmado la muerte de esta mujer en Puente de Vallecas (Madrid) como violencia de género. Con esta ya van 40 mujeres asesinadas por el machismo en España este 2022. El hombre tenía dos denuncias previas por malos tratos contra su mujer y su hija.
Para más crueldad, la mujer que ha fallecido tenía esclerosis múltiple. Muchos se preguntan ahora cómo una mujer con dependencia podía estar al cuidado de su maltratador, y si en este caso fallaron los protocolos. El asesino ya está en manos de la justicia, acusado de homicidio y omisión de socorro.
Cinco días agonizando en el suelo
La víctima, una mujer de 67 años, cayó en el pasillo de su domicilio en Puente de Vallecas el martes 29 de noviembre. Tenía esclerosis y Alzheimer y convivía con el hombre que durante diez años hizo de su vida un infierno. Este le puso una almohada debajo de la cabeza y la dejó agonizando en el suelo.
No le dio de comer ni la medicación que necesitaba, no la atendió ni le prestó la ayuda que necesitaba. No avisó a nadie hasta cinco días después, el domingo 4 de diciembre, cuando llamó a Emergencias. Cuando llegaron la mujer ya estaba muerta, de lado, y en un estado lamentable.
El hombre confesó que la mujer llevaba cinco días en el suelo, pero argumentó que ella misma lo había pedido. Los servicios de emergencia, ante la extrañeza del relato, avisaron a la policía. Al investigar un poco descubrieron que era un maltratador, y pusieron el caso en manos del juzgado de Violencia sobre la Mujer.
Diez años de malos tratos
El juzgado de instrucción ha ordenado la entrada en prisión provisional del detenido por la muerte de su mujer. Según ha confirmado la Delegación del Gobierno, le imputan un delito de homicidio en grado de consumación. La mujer fallecida constaba en el sistema de protección de víctima de la violencia de género.
Según la investigación, el 13 de diciembre de 2020 la hija de la mujer interpuso una primera denuncia. Ponía en conocimiento de la policía que su madre llevaba siete u ocho años sufriendo amenazas y vejaciones de su marido. Le decía cosas como “te voy a matar” o “voy a acabar contigo”.
El escalofriante relato desvela también que la amenazaba constantemente con un cuchillo. Llevaba tres años enferma y en situación de dependencia, siendo atendida por su maltratador. Según la denuncia, en alguna ocasión se había hecho sus necesidades encima sin recibir atención higiénica.
Es entonces cuando la mujer se va a vivir con su hija a Sevilla, y desde allí interpone una segunda denuncia. El juzgado interpreta que viven en comunidades distintas y por eso lo califica como “riesgo bajo”. Aun así, interpone medidas cautelares de alejamiento durante seis meses.
Abandono con final trágico
El 19 de junio la mujer volvió a su piso de Puente de Vallecas, en Madrid, junto a su marido. Se puso en conocimiento de la Guardia Civil que volvían a convivir a pesar de estar vigente la orden de alejamiento. La misma víctima pidió retirar la denuncia, y en septiembre el caso pasó a estar inactivo.
No es un caso aislado, ya que muchas víctimas de la violencia de género desarrollan una dependencia emocional de su agresor. Los expertos llaman “indefensión aprendida” a este mecanismo de sumisión y control. A la postre, se manifiesta con una tolerancia a la agresión física y psicológica.
Nadie se percató del riesgo de que una mujer enferma de esclerosis múltiple viviera al cuidado del hombre que la maltrató durante años. Tenía otra hija que vive en Madrid pero que no tenía ninguna relación con su familia. Su situación de abandono ha acabado trágicamente, de la forma más cruel.