Daniel, el niño de 22 meses que desapareció con su abuelo en Manzanilla, Huelva, ha fallecido. El menor llevaba días en estado crítico en la UCI del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Aunque había experimentado una leve mejoría, los médicos del hospital sevillano acaban de anunciar su fallecimiento.
Daniel desapareció junto a su abuelo Antonio cuando este lo llevaba en coche hasta sus padres en Almonte. 14 horas después un vecino encontró su coche en un camino cerca de donde desaparecieron. El abuelo, de 55 años, había fallecido, pero el menor seguía con vida aunque en estado muy grave.
Las consecuencias de la hipotermia y la falta de alimentación, además de la falta de oxígeno, mermaron sus constantes vitales. Hasta ahora había estado con sedación, pero en las últimas horas había mejorado. Le retiraron la sedación a la espera de la evolución, pero no lo ha resistido y ha fallecido.
Duro mazazo en Manzanilla
El pueblo de Manzanilla ha recibido la muerte del pequeño Daniel como un nuevo mazazo tras el fallecimiento de su abuelo. La madre del menor había explicado en las últimas horas que el niño había mejorado, pero que las siguientes horas serían cruciales. Acaban de recibir la peor noticia, ya que Daniel ha perdido la vida.
Su muerte cierra uno de los sucesos más trágicos que se recuerdan últimamente, y cuya única causa ha sido la mala suerte. Al principio creyeron que Antonio se había suicidado, ya que llevaba años atravesando problemas físicos y mentales. Pero la autopsia reveló que había muerto por causas naturales.
El hombre sufrió una indisposición cuando estaba junto al pequeño, y murió dejando al niño atrapado dentro del coche. Los estuvieron buscando durante horas pero solo al día siguiente y por casualidad encontraron el coche. El niño fue llevado de urgencia al hospital donde ahora ha fallecido.
Trágico desenlace
Los últimos días han sido de mucha angustia esperando nuevas noticias a las puertas del hospital. “Su corazón late, pero su cerebro no responde y las últimas horas serán clave”, dijo su madre tras el hallazgo del niño. Todos en Manzanilla cruzaban los dedos para ver la pronta recuperación de Daniel.
Los médicos habían informado de una ligera mejoría en las últimas horas, motivo por el cual le retiraron la sedación. Esperaban que su evolución fuera favorable. “Sé que su abuelo le está agarrando la mano”, afirmó su madre esperanzada con la idea de que el menor pudiera salir adelante.
No ha podido ser, y el cuerpo del niño no ha logrado resistir las consecuencias de pasar tantas horas encerrado en el coche. Descartan que el hombre se suicidara, y también que el niño ingiriera pastillas. Todo fue fruto de una cruel casualidad, que ha acabado con la muerte del abuelo y su nieto.
Crónica de una desgracia
El pasado miércoles 8 de diciembre Antonio salió de casa con su nieto para llevarlo con sus padres hasta Almonte. Se perdieron por el camino, y el hijo de Antonio y padre de la criatura denunció la desaparición. Se montó un operativo especial y estuvieron buscando a abuelo y nieto durante horas.
Antonio y Daniel pasaron la noche dentro del coche bajo una gran tormenta y con mucho frío. Cuando un vecino encontró el coche al día siguiente el abuelo había fallecido, pero el menor seguía con vida. Fue trasladado al hospital, mientras la policía investigaba los hechos.
Antonio padecía depresión desde hacía años, pero la autopsia descartó que se hubiera suicidado. Era lo mismo que pensaba la familia, ya que Antonio quería mucho a su nieto y nunca lo hubiera puesto en peligro. El hombre fallecido fue enterrado este fin de semana, mientras su nieto peleaba por su vida.
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