La gendarmería francesa investiga la muerte de cuatro miembros de una misma familia en Carantec, Bretaña. Tras observar el escenario del crimen, la policía ha establecido una primera hipótesis. Creen que el padre mató a su mujer y a sus dos hijas de 8 y 11 años, y luego se quitó la vida.
La pareja estaba en proceso de separación, así que el hombre se habría vengado de su mujer de esta forma. El cuerpo de la madre, una mujer de 38 años, estaba en una de las habitaciones. Hallaron los cadáveres de las niñas en su cuarto, y también encontraron muerto al perro de la familia.
El padre, un hombre de 40 años, fue hallado ahorcado en la planta baja de la casa familiar. La disposición de los cuerpos y las características de las muertes apuntalan la teoría de la policía. Los hechos han provocado una profunda conmoción en Carantec, un pequeño pueblo costero de tres mil habitantes.
Todo lo que se sabe
La policía encontró muertos a los cuatro miembros de una misma familia y a su mascota en Carantec, en la Bretaña francesa. Los fallecidos son Gaétan Urien, el padre de 41 años, Florence, la madre, de 38, y las dos hijas Romane e Izia-Marie. El hallazgo se produjo en la casa familiar, el domingo 30 de octubre.
Fue la madre de Florence quien alertó a las autoridades tras varios intentos fallecidos de contactar con su hija. Según los primeros datos de la investigación, no hallaron signos de violencia externa en ninguno de los cadáveres. La principal hipótesis de la policía es que la madre y las niñas fueron envenenadas.
Los rastros de vómito hallados en las camas de las dos menores refuerzan la teoría del envenenamiento. La puerta no había sido forzada ni había desorden en la casa, con lo cual descartan la posibilidad de un allanamiento. Las autopsias acabarán de determinar la causa de las muertes.
Por qué lo hizo
Gaetan Urien trabajó en una funeraria entre 2011 y 2019, y luego en una fábrica de mármol en la región de Morlaix. Su esposa Florence dirigió un salón de belleza antes de que la pandemia les obligara a cerrar, y luego hizo de vendedora. Las dos menores iban al colegio en la región de Morlaix.
Una vez se aclare la causa de las muertes, la investigación tendrá que descubrir el motivo de la matanza. El juez ha decretado el secreto de las actuaciones, aunque la investigación inicial apunta a un parricidio por despecho. El padre se habría vengado de su mujer por su intención de separarse.
El matrimonio estaba en pleno proceso de separación, y el padre de familia habría llevado a cabo su venganza con espeluznante frialdad. Parece que envenenó a su mujer y a sus hijas, y una vez muertas se ahorcó. También acabó, al parecer, con el perro de la familia que apareció muerto.
La teoría de los vecinos
Según la investigación, el matrimonio estuvo unido durante 13 años pero los problemas de convivencia llevaron a la separación. El proceso de separación también estaba siendo muy difícil, en medio de un clima de mucha tensión. El 19 de octubre, la madre acudió a comisaría para denunciar a su marido.
Finalmente no quiso presentar cargos contra él, confiando en que finalmente podría lograr un acuerdo amistoso con su ex. La mujer había recibido un bofetón de su marido tras una discusión, y se había ido sin sus hijos a casa de sus padres. La policía le recomendó que contactara con asociaciones de mujeres.
La tragedia familiar tuvo lugar en la pequeña casa familiar, de color blanco, a la entrada de Carentec. Los vecinos describen a la familia como “encantadora” y reconocen que están en estado de shock. Creen que el padre perdió el control a raíz de una separación que nunca aceptó: “Es un horror”.