La Guardia Civil investiga el hallazgo de un matrimonio muerto y semidesnudo en el interior de un domicilio en la localidad valenciana de Llíria. Se trata de una pareja de 55 y 56 años de origen ecuatoriano. Los cuerpos no presentan signos de violencia y han establecido una primera hipótesis.
Los cadáveres fueron hallados este lunes en una casa del municipio de Llíria, cerca de Valencia. A la espera de recibir los resultados de la autopsia, los agentes han establecido una primera hipótesis. Creen que la pareja murió mientras dormía por la inhalación de monóxido de carbono.
Este fenómeno se conoce como “la muerte dulce” o “la muerte silenciosa” y se produce por la inhalación de un gas tóxico. Se llama así porque las víctimas perecen sin darse cuenta, adormecidos por la propia acción del gas. El origen suele ser siempre la mala combustión de aparatos eléctricos en el hogar.
Macabro hallazgo en Llíria
El matrimonio hallado muerto en Llíria era de mediana edad, de origen ecuatoriano aunque con nacionalidad española. Los allegados alertaron a la policía tras encontrar al hombre y a la mujer inconscientes. Los cadáveres estaban tirados sobre la cama, semidesnudos y sin signos vitales.
Una vez confirmadas las muertes se procedió al levantamiento de los cadáveres y su traslado al Instituto de Medicina Legal. Allí serán sometidos a la autopsia para esclarecer las causas de la muerte. Al no haber signos externos de violencia en los cuerpos, descartan inicialmente indicios criminales.
El fallecimiento de esta pareja ha causado una gran sorpresa entre los allegados, que han quedado conmocionados tras lo ocurrido. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación, y están a la espera del análisis forense. Lamentablemente, no es la primera vez que ocurre un suceso así.
Descubiertos por sus propios hijos
Wilmer y Nancy, así es como se llaman las víctimas mortales de este suceso ocurrido en la provincia de Valencia. Según informa Las Provincias, los cadáveres fueron descubiertos por los hijos de la pareja en la vivienda conyugal. Los hechos ocurrieron en la casa de campo de Camí Cabezo Roig, sobre las 14:00 horas del día de ayer.
Hace menos de un mes hallaron los cuerpos sin vida de un matrimonio en Godall, provincia de Tarragona. El escenario era el mismo, no había signos externos de violencia y todo apuntaba a una intoxicación por monóxido de carbono. Los fallecidos eran un hombre de 61 años y su mujer de 54.
La muerte silenciosa
La intoxicación con monóxido de carbono suele producirse por la mala combustión de aparatos eléctricos, estufas y chimeneas. La concentración de gas y la falta de oxígeno en un espacio cerrado producen la intoxicación. Al respirar el gas se produce una insuficiencia de la sangre para transportar el oxígeno.
El riesgo de intoxicación aumenta durante el sueño, y por eso la mayoría de las víctimas mueren mientras duermen. También se produce por la mala ventilación de una estancia. El color amarillo o anaranjado de la llama en cocinas, estufas y calefactores indica que se está produciendo una mala combustión.
El gas no tiene color ni sabor, y por eso las víctimas no se dan cuenta de que lo están inhalando. Se recomienda no dormir junto a estos aparatos y ventilar las estancias de vez en cuando. También realizar una revisión periódica de los dispositivos, y mantenerlos apagados durante la noche.
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