La preocupación crece cada vez más en Andalucía por la decena de terremotos que azotan desde hace días la provincia de Granada. Desde que empezó la serie de temblores el sábado, el más fuerte hasta ahora, se han producido numerosas réplicas, algunas de ellas de más de 4 grados en la escala de Richter. Ante esta situación, los expertos se han pronunciado para explicar por qué se están produciendo estos fenómenos con tanta frecuencia, a la vez que hacen un llamamiento a la calma y afirman que hay una muy baja probabilidad de que estos movimientos vayan a más.
En este sentido, investigadores de Geodinámica de la Universidad de Granada (UGR) y del Instituto Andaluz de las Ciencias de la Tierra han explicado que estos constantes terremotos que llevan sacudiendo Granada des de hace días se deben a la aproximación que están viviendo actualmente las placas euroasiática y africana, calculada en unos 4 o 5 milímetros.
En un comunicado enviado por la UGR, se añade que los terremotos que está sufriendo Granada estos días se consideran de magnitudes entre pequeñas y moderadas, y que ocurren durante periodos discontinuos y recurrentes. En este sentido, los investigadores también explican que los recientes temblores son fruto de la liberación brusca de energía acumulada en las fallas, justamente por movimiento de estas dos placas tectónicas.
El epicentro de los terremotos
«Los eventos sísmicos recientes están relacionados con la actividad de fallas normales de dirección noroeste-sureste localizadas en el entorno de Santa Fe», ha explicado el investigador Jesús Galindo de la UGR, que añade que la mayor sismicidad se está dando a una profundidad de entre 3 y 12 kilómetros, siendo la zona de la Vega de Granada (fracturada en su interior) la que forma el bloque superior de esta zona de falla y, por tanto, la que es el epicentro de esta actividad sísmica tan activa.
Esta zona de deformación se prolonga por el sureste de la Vega de Granada hacia Padul y Dúrcal, alcanza el Mar de Alborán, donde ocurrió la serie sísmica de 2016, y se extiende hasta Alhucemas (Marruecos), afectada a menudo por algunos importantes terremotos, como el catastrófico del año 2004. De hecho, algunos de los seísmos de estos días se están notando en Marruecos y Argelia también.
Unos terremotos dentro de la normalidad
Pese al gran susto que están pasando los habitantes de Granada, incluso con la salida de centenares de vecinos a la calle en plena noche y toque de queda por miedo a seísmos más fuertes, lo cierto es que los terremotos que estamos viviendo entran dentro de la normalidad en esta zona de España.
De hecho, en este punto de Andalucía hay una elevada actividad sísmica durante todo el año, aunque hay periodos en los que es más elevada, como es el caso. Asimismo, los expertos apuntan a que, en este periodo, nada hace pensar que podría producirse un temblor aún más fuerte de los vividos recientemente.
No obstante, Granada y más puntos del sureste español son la historia de los terremotos en nuestro país y, desgraciadamente, algunos años se viven fuertes seísmos que han llegado a provocar víctimas mortales, como el de Lorca, en Murcia, el año 2011. A pesar de estas posibilidades, las primeras conclusiones de los expertos apuntan a que nada hace pensar en un empeoramiento de la situación en Granada.
Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), desde principios de diciembre se registran una serie de terremotos superficiales al noroeste de la ciudad de Granada, en el entorno de las localidades de Atarfe, Pinos Puente y Santa Fe.