El miércoles por la noche un hombre de 37 asesinó a puñaladas a una chica de 20 años e intentó quitarse la vida. Inicialmente se estableció que la víctima era la hija de la expareja del agresor. Pero la investigación ha dado un giro cuando la policía ha encontrado unas cartas de amor.
Según ha adelantado Vozpópuli, los agentes encontraron varias cartas en la vivienda que el agresor compartía con un amigo. En los manuscritos se refleja que efectivamente el hombre y la joven mantenían una relación sentimental. El agresor tenía una orden de alejamiento sobre la joven y su madre.
Esto convertiría el asesinato de Madrid en un nuevo crimen de violencia de género y serían 49 este año. Con diez mujeres asesinadas y dos casos pendientes de confirmación, este mes de diciembre es ya el más mortífero desde que se cuentan los datos. Una situación que ha obligado al Gobierno a reaccionar.
Pasó varias horas delante del cadáver
Fuentes de la investigación han confirmado que el agresor mantenía una relación con la hija de su expareja, 17 años menor que él. Un juzgado decretó una orden de alejamiento y se fue a vivir a casa de un amigo. Fue en este domicilio donde la noche del miércoles acabó con la vida de la joven.
Una vez cometido el crimen pasó varias horas delante del cadáver, hasta que llegó la policía. Entonces intentó quitarse la vida autolesionándose con el mismo cuchillo, pero no lo consiguió. Fue trasladado al Hospital 12 de Octubre de Madrid, donde permanece ingresado bajo custodia policial.
Los agentes registraron el domicilio donde se cometió el asesinato y encontraron unas cartas que dieron un vuelco a la investigación. Además de la hija de su expareja, la víctima era pareja del agresor. Además, según han podido saber, la madre de la joven asesinada conocía la relación.
Orden de alejamiento
Los servicios de emergencia recibieron la primera llamada sobre las diez de la noche. La policía se dirigió al número 37 de la calle Palomeras en el distrito de Puente de Vallecas. Fue el propietario de la vivienda quien llamó para alertar de que había una joven fallecida en el interior de su domicilio.
Al llegar se dieron cuenta de que la joven llevaba varias horas muerta y el presunto agresor estaba muy alterado. Se infligió lesiones de arma blanca en el cuello, el tórax y el abdomen con la intención de quitarse la vida. Una psicóloga del Samur se encargó junto a la policía de trasladar la fatídica noticia a la madre.
El caso está ahora en manos del Grupo de Homicidios de la Policía Judicial de Madrid. La madre había denunciado en las últimas horas al maltratador y esto había aumentado el carácter violento del hombre. El día 21 de diciembre fue detenido y se decretó una orden de alejamiento sobre madre e hija.
La joven acudió a su casa
El hombre y la joven, los dos de origen peruano, siguieron manteniendo contacto a pesar de la orden de alejamiento. Según la investigación policial, la joven acudió el miércoles por la mañana a la casa donde residía la expareja de su madre. Fue en el transcurso de ese día cuando se produjo el crimen.
La policía está a la espera de que el hombre se recupere de sus heridas para tomarle declaración y saber exactamente qué pasó. La principal hipótesis es que la joven acudió a casa del hombre para poner punto y final a la relación. Y que en un arrebato de ira el agresor acabó con su vida.
El Ministerio de Igualdad está recabando información sobre este caso para confirmar si se trata de un crimen de violencia de género. Estudian también la muerte de una joven que se precipitó al vacío desde un sexto piso en Alicante. Con estos dos casos, los asesinatos machistas se elevarían a 50 en 2022.
La situación es muy preocupante y el Ministerio de Igualdad se ha reunido de urgencia para tomar medidas. Las víctimas tienen a su disposición el teléfono 016, y en caso de emergencia pueden llamar también al 091 (Policía Nacional) y 062 (Guardia Civil). Todos tenemos la responsabilidad de denunciar los casos en nuestro entorno.
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