Un grupo de senderistas ha encontrado restos óseos cerca de la zona en la que desapareció Alejandro Mencía, según ha informado la Guardia Civil a EFE. Por el momento, aún no se puede determinar si los huesos hallados podrían ser humanos. El joven desapareció en mayo de 2020, con tan solo 31 años.
La Guardia Civil recibió una llamada el pasado jueves alertando del hallazgo de estos restos, que vuelve a aportar una nueva pesquisa al caso. Según informa Europa Press, tras su desaparición ya se buscó por esa zona sin éxito. Hasta ahora se desconocen más datos sobre este descubrimiento a la espera de los resultados de las pruebas forenses, que ya se le están practicando.
Alejandro Mencía pasaba el día con amigos
Los hechos ocurrieron hace dos años en un paraje natural de Cantabria. Alejandro Mencía se encontraba celebrando un cumpleaños con amigos en una cabaña en el entorno de Cruz de Fuentes de Campoo de Suso. Allí disfrutaban de una barbacoa al mediodía.
Después de comer, Alejandro Mencía y un amigo caminaron monte abajo para llegar al río. Querían limpiarse las manchas que se habían provocado tras simular una pelea de Kick Boxing. Al llegar al agua, vieron que el afluente no tenía suficiente caudal para ello.
En ese momento, tal y como informa Caso Abierto, su amigo le comentó que iría a ver si arriba había más agua para poder limpiarse mejor. Pero Alejandro no subió con él y ambos se separaron. Desde ahí no se volvió a saber nada más del desaparecido.
Su amigo volvió solo a la cabaña, sin rastro de su acompañante. Ante esta situación, el grupo comenzó a buscarlo durante varias horas por las zonas más cercanas a donde se encontraban. El joven no llevaba ni teléfono ni documentación, ya que lo había soltado antes de bajar.
Tras una larga búsqueda sin resultados, los jóvenes fueron a comprobar si se había marchado a casa de su tío, con quien vivía. Al no encontrarlo allí, y enterarse el familiar de lo ocurrido, se denunció de inmediato su desaparición. En ese momento, la Guardia Civil activó un gran dispositivo de búsqueda por la zona donde se le vio por última vez.
Búsqueda que no dio resultado. Alejandro pudo verse sorprendido por una densa niebla cuando se separó de su acompañante, lo que le pudo provocar una desorientación. Hasta ahora, no se conocen más datos sobre lo que ocurrió esa tarde en Cantabria, pero esta nueva pista podría aportar una nueva hipótesis que ayude a esclarecer lo sucedido.