Logo whatsapp
Montaje con foto de policía

David, el español hallado muerto en un pozo: planearon la venganza durante 10 años

La Policía Nacional investiga este macabro crimen cometido en la provincia de Sevilla

La Policía Nacional de Sevilla se encuentra ante la investigación más compleja desde el triple crimen de Dos Hermanas, hace cinco años. Una operación policial ha conseguido localizar el cadáver de David Gómez. Este vecino de Coria del Río llevaba desaparecido desde el 21 de junio de 2022.

El hallazgo del cadáver, en el pozo de una parcela de Pilas, ha sido posible gracias a una intensa investigación. La Operación Thazard (Melva en inglés) ha conseguido destapar una venganza vinculada al tráfico de drogas. David fue víctima de un macabro crimen cocinado durante diez años.

Todo parte de 2012, cuando el fallecido participó en un robo de hachís perteneciente al clan de Pepe el Tarta. Durante todos estos años habrían estado planeando la venganza contra el responsable. El cadáver presentaba tres tiros de escopeta y había sido lastrado al fondo del pozo atado a unos ladrillos.

Operación Thazard en marcha

La Policía Nacional ha revelado en una rueda de prensa los detalles de la investigación en el marco de la Operación Thazard. La operación, encabezada por el Grupo de Homicidios, ha conseguido llegar hasta el cadáver de David Gómez. Todo empezó con su desaparición, el 21 de junio de 2022.

Agente de la Policía Nacional
Ha sido una complicada investigación policial | Policía Nacional

Cinco días después de desaparecer, su coche apareció quemado en Torreblanca. La policía sabía que David se dedicaba a los vuelcos, que es como se conocen en el argot criminal los robos de droga. Esto hacía presuponer que contaba con muchos enemigos y que podría haber sido víctima de un ajuste de cuentas.

El Grupo de Homicidios pidió la colaboración de los agentes de Coria del Río y personal de la Brigada de Policía Judicial. Se mentalizaron para una investigación larga y complicada. Visionaron cientos de horas de cámaras, rastrearon varios terminales móviles y revisaron llamadas intencionales. 

Consiguen saber la verdad

Inicialmente se toparon con el hermetismo en el entorno de la víctima, que se negaban a ofrecer información sobre el caso. Los familiares de David no se fiaban de la policía y en sus primeras declaraciones incurrieron en contradicciones. Poco a poco, los agentes consiguieron romper ese secretismo. 

Gracias a la confianza que consiguieron establecer con el entorno, finalmente pudieron obtener una información relevante. David Gómez había participado diez años atrás en un vuelco contra la propiedad de El Tarta. Aquel robo provocó un grave perjuicio económico y un gran descrédito a este clan.

Los agentes habían descubierto quiénes eran los autores materiales del homicidio y sus encubridores. Pero faltaba por saber la localización del cadáver, así que pusieron en marcha una operación con dos emplazamientos. La primera fase se llevó a cabo en septiembre, en casa del sospechoso.

Localización del cuerpo

Los agentes planearon la entrada en casa del principal sospechoso, una casa de campo en Coria del Río. El Tarta no lo puso fácil, ya que recibió al Grupo de Operaciones Especiales de la policía a tiro limpio. Tenía perros y cámaras en todo el perímetro, y se parapetó en una esquina escopeta en mano.

Imagen de la policía
Extracción de los restos huamnos del pozo | Policía Nacional

“El que entre aquí me lo llevo por delante”, amenazó antes de ser reducido con un tiro en una de sus extremidades. Allí no lograron encontrar nada que sugiriera la ubicación del cadáver. Así que pusieron en marcha la segunda fase, centrada en una parcela de Pilas donde hay varios pozos artesanales.

En uno de esos pozos, a varios metros de profundidad, encontraron el cuerpo de David Gómez envuelto en un toldo y lastrado con ladrillos. Los tres disparos que presentaba fueron producidos con la escopeta hallada en casa de El Tarta. La operación concluyó con cinco detenidos, entre ellos El Tarta.

Operación cerrada

La policía ha detenido a la hija del sospechoso, de 24 años, que trabajaba como jornalera en Badajoz. Los dos participantes del crimen huyeron a principios de julio a Dortmund, y después se trasladaron a Holanda. Para proceder a su detención se puso en marcha la segunda fase de la Operación Thazard.

El hijo de El Tarta y un amigo de este fueron arrestados el 12 de noviembre en Holanda. La hija del sospechoso está en libertad con cargos, mientras que el resto de los detenidos están acusados de ser los autores del homicidio. Así dan por finalizada la operación, que ha desmantelado al clan del Tarta.