Alicia Valera, de 45 años, murió estrangulada el 6 de noviembre de 2020 cuando sacaba a pasear a su perro en la pedanía de La Hoya (Elche). Dos años después, la Policía Nacional y la Guardia Civil han identificado al autor. Se trata de Nikolay, un asesino en serie que mató a dos personas y lo intentó con una tercera.
La policía española ha identificado a este hombre de 26 años como el asesino de Alicia en La Hoya y de un agricultor apuñalado en Los Montesinos. También le acusan de haber intentado matar a una mujer en Torrevieja. Todos los ataques se produjeron en 2020 en un mismo radio de acción, la provincia de Alicante.
La identificación del asesino ha sido posible gracias a las pruebas de ADN realizadas en el hospital psiquiátrico donde se encuentra, en Rusia. Los investigadores le consideran “un asesino en serie desorganizado de carácter psicótico”. Durante mucho tiempo, el asesinato de Alicia se vinculó a un posible asesino en serie.
Vivió durante años en España
Las pruebas de ADN demuestran que el asesino de la española Alicia Valera es Nikolay, un peligroso psicópata ruso. Según fuentes policiales, se trataría de un individuo muy violento que escogía a sus presas al azar. Tras cometer dos asesinatos en España e intentar un tercero, volvió a Rusia.
La policía difundió la imagen del asesino captada por unas cámaras de seguridad durante el intento fallido de asesinado de una mujer en Torrevieja. Cometió los homicidios entre julio y noviembre de 2020, y luego volvió a Rusia. Allí cometió un nuevo asesinato, en diciembre de ese mismo año.
Este asesino en serie vivió en España durante al menos 15 años, y su madre era dueña de varias empresas inmobiliarias en Torrevieja. Los investigadores sospechan que esta mujer fue clave para la huida de su hijo a Rusia. Ya en su país, fue detenido por otro asesinato e ingresado en un psiquiátrico por su enfermedad mental.
Dos asesinatos conectados
Su reguero de sangre empezó el 16 de julio de 2020 en Torrevieja, cuando abordó a una mujer en el portal con un arma blanca. La apuñaló varias veces y salió corriendo mientras un vecino ayudaba a la víctima. Los testigos dieron la descripción de un hombre joven, delgado y con el pelo rapado.
El 11 de agosto volvió a actuar, esta vez matando a un trabajador en una finca de Los Montesinos (Alicante). Su cuerpo fue hallado con varias heridas de arma blanca, y los investigadores encontraron rastros de ADN. Lo cotejaron con la base de datos, pero no había ninguna coincidencia.
El 6 de noviembre apareció muerta Alicia, una funcionaria judicial, en el interior de un canal de riego en La Hoya, Elche. Los testigos aseguraban haber visto a un hombre delgado, de pelo corto y con acento de los países del este. También hallaron restos de ADN, lo cual permitió vincular los dos asesinatos.
Orden internacional de detención
La policía montó un operativo especial formado por la Guardia Civil de Alicante, la Policía Judicial de Elche y la Sección de Homicidios de la UDEV. Pidieron ayuda a la Interpol y difundieron la imagen del sospechoso pidiendo la colaboración ciudadana. Hace apenas unos meses, surgió la primera pista.
La Interpol informó a mediados de 2022 de la llegada a Moscú de un hombre que coincidía con la descripción del sospechoso. Había sido detenido por otro delito de asesinato, y enviado a la cárcel de manera provisional. De ahí fue derivado al hospital psiquiátrico donde se encuentra en la actualidad.
Las pruebas de ADN confirmaron el pasado 24 de octubre que Nikolay es el autor de los dos homicidios y otro en grado de tentativa en España. Además, su aspecto físico coincide plenamente con la descripción de los testigos. Las autoridades españolas ya han emitido una orden internacional de detención.
El bulo del asesino en serie de mujeres
El asesinato de Alicia Valera se produjo en el mismo espacio temporal que otras tres mujeres muertas en la Comunidad Valenciana. En enero de 2021 apareció muerta Florina Gogos, una prostituta rumana de 19 años. En el mes de abril aparecieron muertas otras dos mujeres, Olga Pardo y Johana Andrea.
Había algo que unía a las cuatro muertes, y es que los cuerpos habían sido encontrados en una acequia. Entonces empezó a circular la sospecha de la existencia de un asesino en serie de mujeres. Esto desató el pánico en la zona, y muchas mujeres dejaron de salir de casa por miedo a ser atacadas.
Los investigadores siempre descartaron esta opción, y poco a poco la resolución de los casos les ha dado la razón. En julio de 2021 detuvieron a un hombre de 60 años como presunto autor del crimen de Florina Gogos. Ese mismo mes, arrestaron a otro varón como sospechoso de la muerte de Johana Andrea.
Por su lado, la investigación del caso de Olga Pardo concluyó que había muerto de forma accidental al caer a la acequia y asfixiarse. Con la resolución del caso de Alicia Vera se cierra el expediente de estas extrañas muertes. No estaban conectadas entre sí, aunque sí había un asesino en serie.