Cataluña creará su propia Agencia Espacial y pretende enviar sus dos primeros nanosatélites al espacio en el primer semestre del 2021. Así lo ha anunciado el gobierno de la Generalitat este martes, 27 de octubre, temiendo un nuevo choque de competencias con el Estado. La inversión inicial del proyecto será de 2,5 millones de euros y pretende generar cerca de 1.200 puestos de trabajo en este campo en el futuro.
«Cataluña no quiere perder el tren en esta industria de alto valor añadido», ha explicado el ‘conseller’ de Políticas Digitales, Jordi Puigneró. «Calculamos que cada euro invertido en este sector se multiplicará por 15 en los próximos años», ha añadido Puigneró.
Durante este período de 15 días, la Generalitat calcula que se podrá multiplicar por 2,5 las empresas catalanas en la industria ‘New Space’, pasando de las 30 actuales a unas 75. Esto implicaría multiplicar por cuatro los puestos de trabajo de este sector y por seis la facturación de estas empresas.
«Estamos ante un sector económico emergente vinculado a los pequeños satélites de bajo coste, que orbitan a baja altura y utilizan tecnologías comerciales», ha manifestado Puigneró, recordando que, hasta ahora, éste era un terreno reservado para las grandes potencias de la industria aeroespacial. «Se trata de un proyecto que no es fruto de la improvisación», apuntó Puigneró. En este sentido, la Generalitat enmarca la nueva estrategia en una «democratización del espacio».
Nuevo choque con el Estado
Este salto al espacio de Cataluña augura un posible nuevo choque de competencias con el Estado. En este sentido, Puigneró ha reiterado que este campo se encuentra en «aguas internacionales» y reitera la «mejora» que este proyecto implicará para la economía y servicios del territorio catalán. «Confiamos en que el estado no bloquee nada y no busque tres pies al gato. No lanzaremos ningún satélite desde Cataluña», concluyó Puigneró.
Mejora de la cobertura móvil y las previsiones del tiempo
Esta estrategia contiene una nueva infraestructura experimental avanzada de telecomunicaciones en colaboración con el Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña (IEEC). Esto implicará el diseño, construcción y puesta en órbita de dos nanosatélites que mejorarán la conexión 5G en Cataluña, así como avances en la observación terrestre.
«Uno de los nanosatélites servirá para complementar las redes terrestres y, por ejemplo, perfeccionar la cobertura en los parques naturales para controlar los rebaños en alta montaña; el otro permitirá monitorizar Cataluña desde el espacio en tiempo real y será de gran ayuda en caso de grandes desastres como el 'Gloria' o para analizar la contaminación aérea», ha explicado el director general de Innovación y Economía Digital , Dani Marco.
Otras aplicaciones pasarían para poder comprobar el estado de los cultivos en Cataluña, mejorar la previsión meteorológica, estudiar las reservas de agua en embalses y pantanos u observar la contaminación lumínica y sus efectos. Se trata de nanosatélites de uno a diez kilogramos de peso, de órbita baja (menos de 2.000 kms) y con costos que van de los 500.000 euros a los 2 millones de euros. El diseño y construcción de estos artefactos también es más rápido y se reduce a 6 u 8 meses, y tienen una vida útil de unos 4 años.
El objetivo de la Generalitat es poner en órbita estos dos primeros nanosatélites el próximo semestre de 2021 y añadir cuatro más en los próximos cuatro años.