Efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil buscan sin descanso a Cédric Tauleygne, acusado de un doble crimen en Francia. Habría cometido los asesinatos en la ciudad francesa de Tarbes, y luego habría cruzado la frontera hacia España. Lo buscan en la peña Oroel (Huesca) y su entorno.
Según la gendarmería francesa, el fugitivo es un militar de 34 años con gran experiencia en supervivencia. “Es peligroso y podría ir armado”, es la advertencia de la policía ante la presencia de este sujeto en suelo español. Los agentes están peinando la zona de Oroel con extrema precaución.
La policía española tiene indicios de que el fugitivo podría encontrarse en esa zona y han distribuido su imagen por si alguien lo ve. Cédric es sospechoso de haber matado a dos personas la tarde del lunes por una venganza sentimental. Temen que pueda cometer más fechorías en su huida.
Ha matado a dos profesores
La policía peina el entorno de la peña Oroel, cerca de Jaca, en busca del acusado de un doble crimen en Francia. Es sospechoso de haber matado a dos profesores en el colegio Desaix en la ciudad de Tarbes (sur de Francia). El presunto asesino abandonó el lugar de los hechos en motocicleta.
Las víctimas son un profesor de educación física de 55 y padres de dos niñas, y una maestra de francés de 32 años y madre de dos niños. La mujer fue hallada herida de bala cerca de la casa del profesor asesinado. Se desconocen los motivos, aunque todo apunta a un móvil sentimental.
La policía española encontró la motocicleta de Cédric en el entorno del monte Oroel, y por eso buscan allí al sospechoso. El presunto asesino utilizó una pistola para cometer el crimen y por lo tanto es probable que vaya armado. Además es un militar experimentado en situaciones de riesgo.
Tras el rastro del asesino
La hipótesis principal es que el fugitivo realizó un periplo de unas dos horas entre Tarbes y Jaca. Habría abandonado su moto en el paraje montañoso de Oroel, y habría seguido su huida a pie. Conoce las principales técnicas de supervivencia para sobrevivir en el monte y esconderse de la policía.
La gendarmería de los Altos Pirineos está rastreando la ubicación del fugitivo con el apoyo de la Sección de Investigación de Toulouse. La voz de alarma la dio un vecino que vive justo al lado donde se cometieron los crímenes. El hombre descubrió a la mujer malherida y el cadáver de un hombre.
También observó al sospechoso huir en motocicleta y dio la voz de alarma a los agentes. La fiscalía francesa ha confirmado que los crímenes se cometieron con arma de fuego, pero de momento no han desvelado el móvil. La policía gala participa en la búsqueda con controles de carretera y un helicóptero.
Podría haberse suicidado
Las autoridades francesas comunicaron el caso a la policía española, que emprendió de inmediato la búsqueda del sospechoso. Negociadores de la gendarmería mantuvieron contacto telefónico con el fugitivo. Este les dijo que tenía intención de suicidarse, así que no descartan que esté muerto.
El martes por la mañana encontraron la motocicleta del sospechoso en el pequeño pueblo de Bernués, en Jaca. La policía comprobó que el vehículo hallado junto a la calzada pertenecía al prófugo. Sospechan que salió huyendo hacia al monte con la intención de quitarse la vida.
Pero no descartan ninguna otra opción, como que siga vivo o que haya escapado hacia otra zona. La presencia de este peligroso criminal ha alterado la tranquila convivencia de los vecinos del lugar. La alcaldesa reconoce que no pueden pegar ojo con la idea de tener a un prófugo en el pueblo.
La Guardia Civil estuvo preguntando si alguien había visto al hombre, y advirtió a los lugareños que tuvieran cuidado. “No sabemos si ha huido al monte, campo a través, hacia la peña Oroel o si ha podido escapar”, afirmó la alcaldesa. Los vecinos esperan que el caso se resuelva lo antes posible.