España está dando un paso crucial hacia una gestión más eficiente de los residuos plástico. Se trata de la implementación del sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR). Este modelo, que ya se utiliza en otros países europeos, busca solucionar las deficiencias del reciclaje de botellas de plástico, un área en la que el país ha fracasado hasta ahora. En 2023, solo el 41,3% de las botellas plásticas fueron correctamente recicladas, muy por debajo del objetivo del 70% establecido por la Ley de Residuos.
Este nuevo sistema obliga a los consumidores a pagar un recargo por las botellas de plástico al momento de la compra. Este será reembolsado si devuelven el envase vacío en una de las máquinas habilitadas para este fin. Además de las botellas, el sistema se ampliará a otros envases como latas y briks. Se espera que el SDDR no solo incremente las tasas de reciclaje, sino que también fomente un comportamiento más responsable entre los consumidores, incentivándolos a devolver los envases para su reutilización.
Te pagarán para devolver los envases
Según un informe reciente del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco), esta medida se toma debido a la ineficacia del modelo actual. El reciclaje de botellas de plástico en España no alcanza las cifras necesarias para cumplir con los objetivos ambientales. En respuesta, el gobierno busca instaurar un sistema que sea más efectivo y transparente, como el SDDR, el cual estará en funcionamiento en su totalidad a partir de noviembre de 2026.
La implementación del SDDR es una muestra de la creciente preocupación por la sostenibilidad y el reciclaje en España. Ecoembes, la entidad encargada de gestionar el reciclaje de plásticos, asegura que el sistema actual ha mejorado, pero las cifras del gobierno y las organizaciones medioambientales no coinciden. Estas diferencias se deben a los métodos utilizados para contabilizar los envases reciclados. Sin embargo, tanto el Ministerio como Ecoembes coinciden en que el SDDR es necesario para alcanzar las metas de reciclaje de la Ley de Residuos.
A pesar de estas diferencias, muchos sectores celebran la medida. La Alianza Residuo Cero, compuesta por más de 130 entidades, considera el sistema como un avance histórico. Además, organizaciones como Greenpeace lo celebran como una victoria después de años de campaña en favor del reciclaje de botellas.
Para ellos, el SDDR es una herramienta clave para promover una economía circular y reducir la cantidad de residuos plásticos. Estos terminan en vertederos o en el medio ambiente.
La implementación del SDDR supone una revolución en la gestión de los residuos plásticos en España. Se alinea con los estándares europeos de reciclaje y lleva al país un paso más cerca de lograr sus objetivos ambientales. A partir de 2026, se espera que este sistema sea parte integral de la vida cotidiana de los españoles. Ayudará a crear una sociedad más consciente y responsable con el medio ambiente.