El cielo no deja de sorprendernos y, más allá de la agenda astronómica de una primavera llena de eventos espectaculares, de vez en cuando nos regala sorpresas con sucesos imprevistos que dejan a más de uno con la boca abierta. Este es el caso del último fenómeno que ha tenido lugar en España a lo largo de las últimas horas en forma de una bola de fuego que ha iluminado los cielos nocturnos de medio país.
En este sentido, el bólido se pudo ver a primeras horas de la madrugada del pasado martes, 20 de abril, principalmente en el sur de Andalucía, pero también fue percibido en más áreas de la mitad sur y del centro de España. En concreto, la bola de fuego se produjo a las 00:35h (hora peninsular española) después de que una roca espacial procedente de un asteroide chocara contra la atmósfera terrestre y se incendiara, volviéndose incandescente y formando un trazo de luz potente que descendía a una velocidad de 61.000 km/h.
Así lo ha corroborado el astrofísico José María Madiedo, responsable del proyecto SMART y miembro del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), que ha analizado un evento que empezó a unos 88 kilómetros de altura sobre el Parque Natural de los Alcornocales, al sureste de la provincia de Cádiz, y avanzó en dirección noroeste, pasando por encima de Málaga y desintegrándose del todo otra vez encima de Cádiz, a unos 37 kilómetros de altura entre los embalses de Guadalacín y Los Hurones.
Pese a que la mayoría de habitantes de la zona no pudieron presenciar el evento debido a las horas intempestivas en las que tuvo lugar, los detectores del proyecto SMART sí registraron la bola de fuego desde las estaciones de detección ubicadas en Sevilla, La Sagra (Granada) y La Hita (Toledo). Este es el vídeo del momento en el que cayó la bola de fuego:
El proyecto SMART está desarrollado por la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa (Red SWEMN). Una red de investigación que coordina el IAA-CSIC y que tiene el objetivo de monitorizar el cielo con el fin de registrar y estudiar el impacto contra la atmósfera terrestre de rocas procedentes de distintos objetos del Sistema Solar.
Las bolas de fuego, un clásico de los cielos en España
Se da la circunstancia de que, a lo largo del año, en España hay muchos eventos parecidos al que hemos podido vivir estas últimas horas. Las bolas de fuego suelen cruzar los cielos de nuestro país, especialmente de la mitad sur, zona donde se detectan la mayoría de caídas de rocas especiales.
Pese a esta consecución de eventos astronómicos, todas las bolas de fuego se acaban desintegrando al poco de incendiarse una vez entran en la atmósfera terrestre, razón por la cual hay muy pocos casos de rocas espaciales que acaben impactando contra el suelo. De hecho, las pocas veces que esto ha llegado a pasar se han tratado de restos diminutos de roca que no han causado daños materiales.
Estas bolas de fuego son visibles desde prácticamente cualquier parte de nuestro planeta, pero a veces sí se da la circunstancia de que una roca espacial acaba impactando contra nuestra superficie. En estos casos, el fenómeno deja de considerarse un bólido para llamarse meteorito. Se han dado circunstancias en las que la roca ha sido suficientemente grande como para provocar un gran socavón y una onda expansiva con daños materiales y heridos, como fue el caso del conocido como el meteorito de Cheliábinsk, en Rusia, que en 2013 causó casi 1500 heridos y graves daños en edificios y viviendas de esta zona rusa. Unas situaciones muy remotas que de vez en cuando se repiten de forma totalmente imprevisible.