Se confirma que los restos humanos que se encontraron en el vertedero de Toledo el pasado 11 de enero corresponden al menor de los primos. Los jóvenes desaparecieron el 10 de diciembre de 2022. Las pruebas de ADN han confirmado que se trata de Ángel Fernández, el chico de 11 años.
El tío de los primos ha trasladado el estado de la familia expresando que “los padres se han derrumbado totalmente” tras confirmarse la noticia. Los resultados finalmente hacen patente la muerte de los dos primos.
El primero de ellos encontrado fue Fernando. El mayor de los primos, de 17 años, fue hallado en el mismo vertedero. Encontraron el cadáver el día 15 de diciembre, cinco días más tarde de que se produjera la desaparición.
El cuerpo de Fernando ya descansa desde hace semanas en un cementerio de Madrid, posterior a la realización de su autopsia. Los resultados evidenciaron que su cuerpo no presentaba signos de violencia.
En el caso de Ángel, su cuerpo continúa en paradero desconocido. Tan solo se ha podido encontrar uno de sus pies. El hallazgo fue lo que permitió a la policía científica realizar la prueba de ADN para confirmar su identidad.
La policía sigue trabajando para hallar el resto del cuerpo de Ángel, así como para aclarar la causa de la muerte de ambos primos.
Un niño normal y corriente amante del fútbol y del piano
Ángel era un niño de solo 11 años aficionado al fútbol. También disfrutaba tocando el piano. Así lo afirmaba el tío de los primos: “Le gustaba mucho tocar el piano con su padre y jugar al fútbol”.
Además, muchos de los vecinos aseguran haber visto a Ángel en numerosas ocasiones corriendo con su pelota por Villa de Vallecas, el lugar donde residía con su familia. El familiar también explicaba que el pequeño “era un niño buenísimo. Le encantaba ir al colegio”.
Desde la familia aseguran que Fernando y Ángel eran uña y carne, siempre iban juntos a todos lados. Explican, incluso, que los niños ya habían viajado con anterioridad a Toledo “dos o tres” veces sin avisar a sus padres. Afirman que “eran muy espabilados”.
Ángel y Fernando se marcharon hasta Toledo para reunirse con la exnovia del último mencionado. La familia contó que Fernando estuvo saliendo durante una temporada con Lucía, la chica, pero tiempo después cortaron. El chico posteriormente comenzó a salir con otra joven, sin embargo “a la que quería era a Lucía”, afirmó su tío.
El hombre explica que Fernando ya había viajado hasta allí un par de veces con la intención de hablar con la chica. “Quería volver con ella. Pero Lucía se había emparejado con otro”, comentó el familiar.
Tras la desaparición de sus hijos, los padres fueron a visitar a la mencionada chica para preguntarle sobre el paradero de Fernando y Ángel. Allí mantuvieron una disputa, pero Lucía no sabía nada sobre el paradero de ambos chicos. La joven ni siquiera llegó a reunirse con ellos en esa ocasión.
La hipótesis más valorada
En base a las hipótesis de los investigadores, Fernando falleció por refugiarse a dormir en un contenedor. De esta manera pasaría la noche a resguardo del frío. Sin embargo, el joven se asfixió.
Debido a que Fernando y Ángel siempre permanecían unidos, seguramente el menor de los primos corriera exactamente la misma suerte. Sin embargo, la familia no está de acuerdo con esta hipótesis y aseguran que los niños “no se iban a meter ahí a dormir” habiendo otros sitios mucho mejores donde hacerlo.
Por ahora, se mantienen los trabajos de búsqueda para el resto del cuerpo de Ángel. Se espera que, de poder practicarle la autopsia, se resuelvan algunos de los interrogantes que rodean este caso.
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