El pasado 22 de febrero un alumno de dieciséis años mató inesperadamente a su profesora. El joven se levantó del pupitre, cerró la puerta de la clase con llave y atacó a la docente. Los hechos ocurrieron en torno a las diez de la mañana mientras la mujer, de 52 años, explicaba la materia en la pizarra.
El alumno utilizó un cuchillo con una hoja de unos diez centímetros para llevar a cabo la acción. La profesora falleció una hora después a causa de los múltiples cortes que presentaba. El autor del suceso fue detenido después ser convencido por otro docente para entregar el arma con el que la había asesinado.
La víctima era profesora de lengua castellana en el instituto Saint-Thomas d'Aquin. Una docente que llevaba impartiendo clases desde 1997 y, según fuentes del centro, era muy querida por sus alumnos.
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Involucrada al máximo en proyectos escolares
Agnès Lassalle se desplazaba todos los días hasta San Juan de Luz para trabajar. Ese era el trayecto que esta profesora de español hacía en coche desde Biarritz donde, según Le Figaro, vivía con su pareja. La mujer impartía lengua castellana en el Instituto Saint-Thomas d'Aquin en el País Vasco francés.
Antiguos compañeros la describen como una mujer involucrada en su trabajo. En declaraciones a Ouest-France, ex estudiantes y empleados del centro explican que "ella estaba siempre allí y siempre a tiempo, no tenía vida fuera del instituto". Era una persona muy discreta, pero según todos sus allegados estaba muy arraigada al centro escolar.
Llevaba 26 años impartiendo clases, era su vocación. Participaba en todos los proyectos escolares que había, los organizaba e incluso animaba a sus alumnos a través de excursiones y salidas. Además de su profesión, según describe Ouest-France, Lassalle era una apasionada del flamenco, algo que concuerda con la asignatura que impartía.
Agnès era una profesora muy tranquila y los que la conocían aseguran que era muy difícil entrar en conflicto con ella. Nadie tenía palabras malas hacia ella. Es por ello por lo que este suceso tan inesperado ha provocado tal desconcierto en toda Francia.